
En la búsqueda de la felicidad, muchos han alcanzado hitos como ser padres, tener éxito laboral o alcanzar un alto estatus social. Sin embargo, según un estudio de Booking, la empresa de viajes, la verdadera joya de la felicidad se encuentra en la experiencia de empacar y viajar. Este hallazgo sorprendente proviene de una encuesta realizada a 17,000 personas en todo el mundo.

Desde la planificación hasta el retorno, el viaje despierta sensaciones placenteras. Para el 49%, la felicidad de un viaje supera incluso la de casarse, mientras que el 51% la prefiere a una cita con su pareja. Este impacto emocional se compara a menudo con hitos significativos como casarse o tener un hijo. El experto en felicidad, Shawn Achor, destaca que un viaje bien planificado puede mejorar la calidad de vida, proporcionando energía renovada para abordar las tareas diarias.

En una encuesta posterior de Booking a 18,000 personas, el 55% prefiere viajar a casarse, y un 29% elige viajar antes que tener un hijo. Curiosamente, más de la mitad opta por viajar en lugar de comprar joyas, aparatos tecnológicos o realizar mejoras en sus viviendas.
Los recuerdos de los viajes se revelan como una fuente inagotable de felicidad, según la mayoría de los encuestados. Además, científicos respaldan estos hallazgos, demostrando que quienes viajan experimentan un estado de ánimo más pleno y satisfactorio, encontrando la dicha no solo durante el viaje, sino también al compartir sus experiencias con otros.

Así, el secreto de la felicidad parece radicar en la capacidad de viajar por el mundo, de sumergirse en nuevas culturas y crear recuerdos que perduran, superando incluso los momentos más trascendentales de la vida.